Despedida: Nunca un adiós, siempre un hasta luego.
Al finalizar la rotación de Cirugía pude darme cuenta de la maravillosa oportunidad que tuve. Cada día fue emocionante y desafiante, llenos de alegrías y momentos de grata felicidad. Todo fue aprendizaje, desde lo básico con respecto a la materia hasta consejos de vida que nos brindaban nuestros preceptores. No hubo instante alguno en donde una situación no nos sirviera como fuente de enseñanza para poner en practica en nuestro futuro. Agradezco a mis preceptores por brindarnos su tiempo y espacio. Gracias a ellos pude motivarme día tras día a seguir dando la milla extra. Sus vidas son ejemplo de sacrificio y abnegación, pero también de que cuando se hace lo que a uno le gusta el trabajo no es tan pesado. Finalizo esta materia con la premisa de que los objetivos con los que inicie esta travesía fueron cumplidos en su totalidad y sobrepasaron mis expectativas. Me voy confiada de que las herramientas y enseñanzas que depositaron mis maestros en mi, no serán utiliza...
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